Reconocer a nuestros técnicos médicos de emergencia durante esta Semana Nacional de EMS le da al Valle del Río Grande la oportunidad de revisar las opciones de entrega para esta pieza de servicios de emergencia críticos para nuestros residentes.
A nivel nacional, no todos los programas se encuentran en los departamentos de bomberos públicos. Hay más de dos docenas de opciones de entrega de EMS de operaciones puramente públicas o privadas; áreas de servicio regionales o locales; EMT voluntarios o profesionales; o combinaciones de los mismos. ¿Cuál o cuáles son los mejores para las ciudades del Valle?
Público o Privado: ¿Es mejor?
Como cualquier consumidor racional, queremos el mejor servicio al menor costo. Entonces, ¿esto lo hace mejor el sector público o el privado? Ambos son capaces.
En Texas, la mayoría de las áreas metropolitanas tienen EMS público, pero el Valle tiende a depender de proveedores privados. Realmente es una decisión local basada en las necesidades y prioridades inmediatas de una ciudad, más que en los méritos filosóficos relativos del capitalismo o el socialismo. Entonces, ¿qué factores impulsan la matriz de decisión pública versus privada?
Los costos pueden ser una gran barrera de entrada para cualquier ciudad. Comprar la mejor ambulancia, una unidad móvil de cuidados intensivos, cuesta aproximadamente $ 170,000. Luego están los suministros, salarios, seguros y otros gastos operativos.
Una empresa privada ofrece una opción llave en mano, a menudo sin costo para la ciudad. Sin embargo, los costos operativos y de inicio de una ciudad pueden compensarse con varias fuentes de ingresos, como Medicare, Medicaid, seguros y pagos privados. Estos ingresos tienden a generar un superávit neto para los departamentos de bomberos.
La conclusión es que si no hubiera ganancias en el negocio de EMS (también conocido como superávit en el sector público), el sector privado no estaría en este negocio.
Criterios a Considerar en Opciones Públicas / Privadas
La complejidad de los servicios médicos de emergencia basados en el departamento de bomberos también es abrumadora. Financiamiento de vehículos, equipos y suministros; contratar a técnicos de emergencias médicas, contratar a médicos supervisores, compañías de facturación, servicios de cobranza, obtener la certificación federal y estatal y coordinarlos enviará a cualquier jefe de bomberos a postularse por un puñado de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos - stat. Las empresas privadas eliminan este dolor de cabeza de los departamentos de bomberos y de los funcionarios electos y designados. Sin embargo, como todo lo que vale la pena, vale la pena.
¿Qué pasa con el tamaño y la sostenibilidad de la comunidad? Los EMS basados en incendios ahora están operando en comunidades más pequeñas como Alton, Mercedes y Palmview. De hecho, ninguna comunidad debería ser demasiado pequeña para tener un programa de EMS público, ya que las fallas del mercado son la razón de ser de la participación del gobierno. El condado de Hidalgo tiene un distrito de servicios de emergencia por esta misma razón, y el Hospital Memorial del Condado de Starr opera su propia flota de ambulancias rurales.
¿Qué pasa con el control y la rendición de cuentas? Los programas de EMS basados en incendios están bajo el control directo de su jefe de bomberos, administrador de la ciudad y el ayuntamiento de la ciudad. No hay intermediarios entre el paciente y el proveedor de EMS. La información se comparte, los problemas se resuelven directamente.
Finalmente, está el servicio. Los programas de EMS basados en incendios en el Valle tienden a utilizar los profesionales más capacitados (paramédicos) y operan los mejores equipos (MICU). Eso es importante cuando las personas necesitan servicios que salvan vidas.
Hacer las Preguntas Correctas en una Emergencia
La atención médica en el Valle está mejorando con la Escuela de Medicina de UTRGV y el nuevo centro de trauma de Nivel 1 en el Doctor's Hospital en Renaissance. Todos los días, nuestros EMT, públicos y privados, hacen un trabajo loable y merecen nuestra gratitud.
Sin embargo, también debemos convertirnos en consumidores de atención médica mejor informados. Antes de marcar el 911, debemos saber si nuestra ambulancia es pública o privada. ¿Cuenta con los profesionales más capacitados (paramédicos), con el mejor equipo (MICU)? ¿Cuáles son los tiempos medios de respuesta? ¿Cómo se resuelven los problemas, con la ciudad o con la empresa de ambulancias?
El primer vínculo en el proceso de respuesta a emergencias comienza con el consumidor. Aprendamos y tomemos las riendas.
Publicado originalmente en The Monitor, 9 de mayo de 2019.
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